
¿Hay que declarar la compra de un coche de segunda mano en Hacienda?
Si está valorando adquirir un vehículo usado, probablemente se pregunte: “¿Tengo que declarar la compra de un coche de segunda mano?” Esta duda es habitual y está justificada, especialmente cuando se trata de transacciones entre particulares o cuando el importe del coche alcanza ciertas cifras. En esta guía elaborada por C. de Salamanca, concesionario de coches de lujo, resolvemos las cuestiones clave que debe conocer en 2025.
Declaración de compraventa: obligación fiscal y trámites
En España, la compraventa de un coche de segunda mano no se declara en el IRPF del comprador, pero sí conlleva el pago de un impuesto concreto: el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales (ITP), regulado por las comunidades autónomas. Este impuesto debe abonarlo el comprador cuando la operación se realiza entre particulares. Si compra el coche en un concesionario, el IVA está normalmente incluido en el precio final y no aplica el ITP.
Cómo se calcula el ITP
El importe a pagar depende del valor fiscal que Hacienda atribuya al vehículo, no del precio real de compra. Cada comunidad autónoma establece un porcentaje, que suele estar entre el 4% y el 8%. El comprador está obligado a liquidarlo en un plazo de 30 días hábiles desde la firma del contrato.
El trámite se realiza presentando el modelo 620 o 621 ante la Agencia Tributaria autonómica, acompañado del contrato de compraventa, copia del DNI y ficha técnica del vehículo.
¿Y si el coche lo compro a un concesionario?
En caso de adquirir el coche a través de un profesional o concesionario (como C. de Salamanca), la operación está sujeta a IVA. Dependiendo del tipo de factura (con IVA desglosado o régimen de bienes usados), podrá ver el detalle del impuesto en el documento de compra. En estos casos, no tiene que pagar ITP ni presentar modelos ante Hacienda, ya que el impuesto está gestionado por el propio vendedor.
Esto supone una ventaja para el comprador, que cuenta además con mayor seguridad jurídica, garantía legal y posibilidad de financiación adaptada.
Declaración en el IRPF: ¿afecta a mi renta?
La compra de un coche de segunda mano no debe incluirse en la declaración de la renta del comprador. No afecta a sus ingresos ni genera alteración patrimonial declarable.
Solo el vendedor particular deberá declarar la operación si obtiene una ganancia patrimonial (lo cual es poco frecuente, ya que los vehículos se devalúan con el tiempo). En el caso de empresas o profesionales, la venta sí forma parte de su actividad económica.
Excepciones y casos especiales
Existen algunas situaciones en las que se requiere atención especial:
- Vehículos de importación: si el coche procede del extranjero, es necesario presentar justificantes de pago de impuestos o autoliquidaciones, y se aplican otras tasas como el IVA intracomunitario o el impuesto de matriculación.
- Pagos en metálico: en operaciones superiores a 1.000 € entre profesional y consumidor, no se permite el pago en efectivo según la normativa vigente.
- Herencias y donaciones: se aplica el impuesto sobre sucesiones y donaciones, con normativas distintas según la comunidad autónoma.
Conclusión: sí, pero depende de a quién compre
La compra de un coche de segunda mano no se declara como tal en Hacienda, pero en operaciones entre particulares debe abonarse el ITP. En cambio, si el vehículo procede de un profesional, será el vendedor quien declare el IVA correspondiente, simplificando los trámites para el comprador.
En C. de Salamanca, le ofrecemos la tranquilidad de adquirir coches premium y coches de lujo con todas las garantías fiscales y legales. Nuestro equipo le acompaña en cada paso, incluyendo asesoramiento documental, revisión jurídica, tramitación de impuestos y gestión del cambio de titularidad.
Porque comprar con seguridad también es una forma de vivir el lujo con confianza.